domingo, 12 de abril de 2020

Descubriendo Amaicha del Valle

Habiendo disfrutado plenamente de San Pedro de Colalao, lo único que restaba al itinerario que quería hacer en ésta oportunidad era el circuito noroeste de la provincia. Amaicha del Valle, sería mi primer destino.

El viaje de unos 165KM, entre la capital tucumana y el poblado, fue un lujazo: La primera parte hasta Famaillá ya la conocía, pero el gran tramo de la ruta 307 fue alucinante. Un destino en sí mismo! Las curvas y contracurvas en permanente ascenso penetran por la selva tucumana de la reserva natural quebrada de los Sosa, y es una experiencia increíble. La ruta pasa por tres parajes destacados: "El Indio", "La Heladera", y "El Fin del Mundo". Pura belleza natural!

Amaicha del Valle es una comunidad indígena de, según el censo de 2010 de 1,327 habitantes, del pueblo calchaquí, que fundamenta su condición de tal invocando la Cédula Real de 1716, ya que los calchaquíes de la tribu Amaicha no adhirieron a las guerras calchaquíes contra los españoles. Como Comunidad Indígena, tiene sus instituciones ancestrales, tales como el Cacicazgo y el Consejo de Ancianos. También tiene un extenso territorio que, en la actualidad cubre desde el Abra de El Infiernillo, continuando por las Cumbres Calchaquíes hacia el Norte, hasta el cerro Pabellón y, en dirección Oeste, hasta la ribera este del Río Santa María.

El estado de la provincia de Tucumán tiene presencia en el territorio Amaicha a través de diversas instituciones, entre otras la Comuna Rural de Amaicha del Valle.

El poblamiento originario data de hace 2300 años, momento en que se establecieron pueblos agricultores y recolectores, probablemente antecedentes de la cultura Tafí.

A mediados del Siglo XVI iniciaron su presencia los conquistadores, pero la ocupación española sobre el valle no pudo consolidarse inmediatamente, ante la resistencia ofrecida por los calchaquíes. Sin embargo, los Amaicha no adhirieron finalmente a la resistencia, y esto hizo que los españoles vencedores les permitieran a los Amaichas mantenerse en sus territorios ancestrales.

Finalmente, en 1716 los españoles firman la Cédula real de 1716, reconociendo a los pueblos originarios como poseedores de las tierras

Recorran conmigo en esta miniserie fotográfica, el centro de esta hermosa comunidad y su periferia. Una verdadera perla, en el noroeste tucumano.



La semana que viene, desandamos el último destino que visité en este viaje: Tafí del Valle