viernes, 29 de agosto de 2014

Ser fotógrafo o hacer fotos



Creo que hay que empezar a diferenciar entre hacer fotos y ser fotógrafo. Todos hacemos fotos, pero pocos son fotógrafos. La diferencia no es si se cotiza o no, sino si respiramos fotografía por los cuatro costados y somos capaces de tener un discurso fotográfico propio.
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Este artículo será polémico. Espero que de lugar a un interesante debate, en el que se diferenciará ser fotógrafo de hacer fotos. Parece lo mismo, pero es muy distinto. Y es uno de tantos problemas que han surgido a raíz de la fotografía digital.
Siempre pongo el mismo símil. Si nos compramos una pluma nadie dirá que somos escritores hasta que se demuestre lo contrario. Sin embargo, cualquiera que tenga una cámara es fotógrafo. Y si tiene un blog, ya sin lugar a dudas. El título lo da la sociedad por lo que se tiene, no por lo que se hace.
Es lo mismo que atravesar en coche un estado mexicano (por decir una extensión enorme) y decir a los conocidos que hemos estado ahí. Realmente hemos pasado, que no es lo mismo que estar. Es un matizlo sé, pero seguro que me entendéis.
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Con la fotografía digital pasa exactamente lo mismo. Todos tenemos una cámara, y todos nos consideramos fotógrafos. Pero desde el principio hay una confusión. Una cosa es que nos guste hacer fotos, y otra muy distinta es que seamos fotógrafos.
La fotografía pierde su sentido real si sólo buscamos fotos bonitas de los lugares que visitamos, sin ninguna conexión.
No quiero decir que sólo los profesionales que cotizamos merezcamos tal título, porque sería soberbio por nuestra parte. Muchos podemos dedicarnos a esta profesión porque así nos han ido las cosas en la vida. Otros no han tenido tanta suerte y tienen que ganarse el pan de otra forma. Y en cuánto pueden agarran la cámara para detener el mundo. Estos tienen mucha más pasión que muchos del mundillo. Y creo que merecen con más justicia el nombre de fotógrafos, con todas las letras.
Una cosa es salir el fin de semana y hacer una buena foto, o dos, o veinte, del sitio que vayamos, y otra es supeditar la fotografía al viaje. Es decir, ir al norte cuando te gusta el sur porque estás buscando algo determinado y concreto que no puedes encontrar en ningún otro lugar. O ir a la árida Castilla en vez de a la exuberante Asturias porque necesitas contar algo que sólo se encuentra bajo el caliente sol que cantó Machado, por poner un ejemplo más concreto.
La fotografía pierde su sentido real si sólo buscamos fotos bonitas de los lugares que visitamos, sin ninguna conexión. Algunos pueden pensar que el nexo somos nosotros, pero eso no basta. Volviendo al símil del bolígrafo, no por escribir un día la carta a la novia y otro rellenar un formulario burocrático se puede decir que seamos escritores. Es así de sencillo.
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Se es fotógrafo cuando se busca un discurso, un estilo que no sea repetir las fotos que hace todo el mundo desde el mirador de San Nicolás en Granada o en cualquier otro lugar turístico. Se es fotógrafo cuando esperamos encontrar una buena luz y esperamos días y días hasta que lo conseguimos. Uno es fotógrafo si lucha por encontrar un estilo ajeno a las modas de los filtros. Si busca inspiración y se olvida de las copias.
Hay talleres impartidos por prestigiosos fotógrafos en los que los alumnos salen haciendo las mismas fotos, sin personalidad propia. Hay gente que cuelga fotos en las redes sociales sin sentido. Unos días un pájaro, otros una niña y también desde la ventana de su coche... Quien mucho abarca poco hace, decían los viejos de mi pueblo.
Todas esas fotos son muy bonitas, seguro. Y algunas puedo decir que son perfectas. Pero se quedan ahí. En un ejemplo perfecto de dominio de las técnicas fotográficas pero que pueden haber salido por casualidad. Hacer una fotografía es muy sencillo una vez que se conoce la técnica. Lo difícil es hacer un discurso completo con la simple ayuda de nuestra cámara.
Por eso me gusta establecer la diferencia entre los que hacen fotos sueltas y bonitas y los que se ve que tienen un trabajo detrás, una investigación propia que les sirve para expresarse y dar un nuevo sentido a las cosas. Para bien o para mal, pocos son fotógrafos. Los demás sólo las hacemos, que ya es bastante. Si no fuera así, los fotomatones serían los mejores fotógrafos del mundo.
Fuente: http://altfoto.com/2014/08/ser-fotografo-o-hacer-fotos

















10 de las mejores escenas improvisadas de la historia del cine

10 de las mejores escenas improvisadas de la historia del cine
Hay momentos en los que los actores sencillamente se salen del guión y son capaces de improvisar una escena más o menos parecida a como estaba escrito, pero con líneas de diálogo mucho mejores. Cinefix ha reunido 10 de esas escenas en un interesante vídeo.
La lista incluye desde comedias ligeras como Bridesmaids, hasta la oscura demencia deApocalipse Now o La Naranja mecánica. En algunos casos, la escena es simplemente una línea de diálogo brillantemente introducida por Kathy Bates. Otras veces es toda la escena la que corre por cuenta del actor. El comienzo de Apocalypse Now protagonizado por Martin Sheen está completamente improvisado y Sheen hasta se hirió de verdad la mano al golpear el espejo.
Otras veces, es toda la película la que está plagada de escenas improvisadas. En la primera entrega de Iron Man. Marvel estaba tan preocupada con los efectos especiales que Robert Downey Jr. decidió adaptar los diálogos como mejor le pareció. A tenor del resultado, nadie discutió los cambios. Esta es la lista proporcionada por Cinefix. ¿Echáis alguna en falta? [Cinefix vía Sploid]
  • Bridesmaids
  • Apocalypse Now
  • Iron Man
  • The Jazz Singer
  • Caddyshack
  • Goodfellas
  • The Breakfast Club
  • This Is Spinal Tap
  • A Clockwork Orange
  • Robin Williams


Fuente: http://es.gizmodo.com/10-de-las-mejores-escenas-improvisadas-de-la-historia-d-1623790228

Cómo no sobrepasar tu límite del plan de datos y llamadas en Android


 Cómo no sobrepasar tu límite del plan de datos y llamadas en Android
Hoy hablamos de nuevo en Androidsis de aplicaciones prácticas que consigan hacernos la vida más fácil en el mundo Android. En este caso particular te contamos cómo funciona una de las que recientemente se han actualizado en la Google Play y que viene siendo una herramienta ideal para controlar tu plan de datos y llamadas en Android. Se llamaCallistic y a continuación te explicamos cómo funciona en realidad y todo lo que podrías hacer con ella. Aunque desde ya te aviso que tiene muchas más cosas extras que las apps oficiales de las compañías telefónicas, las cuales en muchos casos nos sirven para mantener bajo control el presupuesto de llamadas, mensajes e internet en Android.
La diferencia entre Callistic y las aplicaciones que se utilizan en cada compañía telefónica es que en este caso tendrás datos extras que de otro modo no podrías conocer, que te permitirán entender mejor cómo te gastas el plan de datos y llamadas en tu Android. Además, indiferentemente de que cambies de compañía, no tienes por qué cambiar de aplicación. Tan solo bastará un ajuste inicial en el que le indiques los costes asociados para que la aplicación haga todo lo demás por ti.

Callistic: el plan de datos y llamadas bajo control


Callistics – Call statistics
Precio: Gratis
Las aplicaciones nativas que se incluyen en los terminales móviles nos permiten hacernos una idea de cuántos minutos llevamos gastados, o cuántos datos ha consumido nuestro terminal móvil. En el caso de las apps específicas de las operadoras, lo que obtenemos son los datos exactos que se facturarán en el próximo período de facturación que corresponda. Sin embargo, Callistic se orienta de otro modo. Su función es la de encontrar un hueco entre los usuarios que quieren entender mejor los datos más concretos, y sobre todo, que quieren estar seguros de que no se les escapa de las manos el coste de la siguiente factura. Es por ello que las alertas y los límites de llamadas, así como las estadísticas detalladas por contactos cobran una gran importancia en este caso.
Callistic configuración
Lo único que tienes que hacer para que Callistics empiece a trabajar por ti es indicarle cuándo comienza tu período de facturación, cuántos minutos tienes, y los límites máximos con los que quieres que te avise. En algunos casos, este tipo de cosas se pueden gestionar para el plan de datos de forma nativa, aunque con la aplicación las posibilidades de hacerlo aumentan.
Callistic contactos
Otra de las opciones que a mí particularmente me ha parecido especialmente útil de Callistics es precisamente la de acceder a los datos de llamadas, mensajes y datos que hemos consumido de nuestro plan telefónico en cada uno de los contactos de la agenda. Además de ser utilizado como información especialmente útil, tenemos que tener en cuenta que la aplicación puede mostrarnos ideas de ahorro para contratar productos como pueden ser los bonos a números concretos. Si por ejemplo te gastas más del 30% del bono con una persona, quizás te conviene hacer un plan específico de números frecuentes con dicho contacto y reservar el bono para el resto de la lista. Así ahorrarás dinero.
Pero ese ahorro, no sería posible sin acceder a estos datos tan concretos que nos ofrecen en Callistics de forma tan simple. Yo creo que por eso, y por la interfaz tan clara, bien vale la pena echarle un vistazo a fondo a las posibilidades de control del plan de datos y llamadas de la aplicación. Y es que en tiempos de crisis… todo lo que ahorremos resultará siempre positivo ¿no?
Fuente: http://www.androidsis.com/como-sobrepasar-tu-limite-del-plan-de-datos-y-llamadas-en-android/