Ni bien llegamos, la ciudad nos recibe desde los parquecitos linderos a la estación de trenes, y transitando ya los primeros metros cipoleños, entre sus veredas mayoritariamente arboladas, reocrriendo paseos cercanos al tendido ferroviario, llegamos a las plazas principales de la ciudad.
Cipolletti tiene mucha magia y color en los espacios libres, y a pesar de ser una ciudad pequeña, tiene variedad en espacios de esparcimiento, aunque sin dudas la estrella es el Parque, desde donde se pueden ver o participar de diferentes actividades no solo deportivas, sino también artísticas.
La semana que viene, finalizamos el recorrido por Cipolletti, desde la maravillosa Isla Jordán…