En Hollywood, hasta los mitos tienen, en ocasiones, segundas partes. La cultura de la secuela se ha infiltrado por los poros de la piel de los productores, y así es como ha llegado a una de las películas hasta ahora intocables de la cinematografía estaodunidense. La
Warner Bros está planeando realizar una secuela de
Casablanca, más de 70 años después del estreno de esa cinta que, en su magnífica integración de seductoras interpretaciones, un guión sólido, dinámico y de frase que estalla, y una puesta en escena generadora de atmósferas para la sumersión, ha devenido uno de los hitos del cine.
No obstante, antes de alarmarse, es preciso observar los nombres que están detrás de este “sacrilegio”. Y es que la Warner Bros, conociendo el artificio que supondría recrear un guión con el mismo tono que el original, no pretende escribirlo: pretende recurrir a un borrador de
Howard Koch, uno de los tres guionistas de Casablanca, que escribió hace tres décadas, tratando de imaginar una posible continuación de la historia. La escaleta de guión nunca llegó a ser rodada, y ha sido encontrada en la casa de Howard Koch en Woodstock después de su muerte en 1995.
El guión se titula
Return to Casablanca (Regreso a Casablanca), y se centra en la búsqueda infructuosa que inician Ilsa y Laszlo de Rick y Renault, que se marcharon a Brazzaville para unirse a las Fuerzas Francesas Libres. El motivo que impulsa a Ilsa es el descubrimiento de que está embarazada de Rick, y no de Laszlo, así que se lanzan a la búsqueda para contarle la verdad. Tras el imposible encuentro, el niño crece finalmente en EEUU, y cuando tiene edad suficiente. Ilsa le descubre la identidad de su progenitor, y éste se lanza a la búsqueda de de Rick.
Durante varias ocasiones se ha pensado en la puesta en escena de este guión, pero siempre ha sido rechazado, ante el influjo del mito. No obstante, en esta ocasión podría materializarse ante la insistencia de
Cass Warner, nieta de uno de los fundadores de la Warner Bros, que asistió a una clase de guión de Howard Koch donde el profesor desvelaba la existencia de tal guión. Ahora, ella desea llevarlo a la gran pantalla.
No obstante, quedan numerosas incógnitas. ¿Qué actores serían capaces, ya no de igualar, sino de mantener la dignidad ante las portentosas interpretaciones de Humphrey Bogart e Ingrid Bergman? Por el momento, se habla ya de que
Joseph Gordon-Levitt podría interpretar uno de los papeles principales. ¿Y quién podría sustituir a Michael Curtiz en la dirección?
Y es que, hoy en día, hay pocos directores que sigan la senda del cine clásico de Hollywood, fundada en un sólido guión y una correspondencia entre narración y puesta en escena. Hoy en día, la imagen se desliga de la narración y la palabra por su espectacularidad, de modo que hay una descompensación entre imagen y palabra, entre historia y puesta en escena, que aleja la creación cinematográfica contemporánea de la clásica. Salvando a
Clint Eastwood, quizá uno de los pocos directores jóvenes que continúan con la estela clásica sea
Jeff Nichols.
De todos modos, no es el primer intento de realizar una secuela de estas características, pues la Warner Bros ya impulsó un guión titulado Brazzaville que no llegó a ver la luz. Además, en el nacimiento de la televisión se realizó un remake de la obra, en los años cincuenta, ante la imposibilidad de adquirir los derechos de emisión y como forma de atrapar al público. Pero, sin duda, el episodio más conocido de continuación de Casablanca corresponde a los
hermanos Marx, que en 1946 rodaron
A Night in Casablanca (Una noche en Casablanca).
En principio iba a ser una parodia de la cinta de la Warner Bros, pero la productora les envió una carta formal solicitando la sustitución del título. En respuesta, los hermanos Marx enviaron otra carta donde ironizaban la posesión de un nombre, como si los fundadores de la Warner hubiesen fundado la ciudad, y señalaba sus derechos de autor por la utilización de la palabra hermanos, que los Marx adquirieron antes que los Warner:
¿qué pasa con “Hermanos Warner” (Warner Bros)? ¿También eso es vuestro? Es posible que podáis usar el nombre “Warner”. Pero nunca la parte “Hermanos”, profesionalmente, nosotros éramos “Hermanos” mucho antes que vosotros. Incluso antes que nosotros, ha habido otros “Hermanos”: los hermanos Smith, los hermanos Karamazov, Los hermanos Dan…
Fuente:
http://extracine.com/2012/11/casablanca-secuela-howard-koch