domingo, 16 de junio de 2019

Los Colores de Purmamarca

La Cuesta de Lipán nos depositó impecablemente y en un suspiro, en otro de los puntos clásicos entre los referentes turísticos jujeños. Hoy, recorremos Purmamarca.

En lengua aimara purma significa desierto y marca ciudad en, literalmente "ciudad del desierto", pero desierto en dicha lengua significa también la tierra inculta, no tocada por la mano humana, de allí que la traducción más adecuada en esta lengua sea "Pueblo de la Tierra Virgen" pero en quechua se interpreta como “pueblo del león”. Estos topónimos se relacionan a la etnia Omaguaca.

Quizá a nivel turístico, sea reconocible como el más pintoresco pueblo de la quebrada de Humahuaca aunque, geográficamente, pertenezca a otra quebrada transversal homónima, rodeada por sierras multicolores. La ancha Quebrada de Purmamarca, semeja un gran valle frente al río Grande poblada de los típicos cardones del ecosistema de los cerros, los que dan una característica propia a la vista de la región.

El poblado arrastra una tradición milenaria y ya existía en los tiempos de la conquista americana. La Iglesia es de 1648, consagrada a Santa Rosa de Lima. Su fiesta patronal se celebra el 30 de agosto, y cuenta con actos religiosos, sikuris y misachicos con acompañamiento de erkes y bombos. Fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1941, de arquitectura sencilla, muros de adobe, techo de cardón y torta de barro, conformando una nave única y angosta. En el interior hay pinturas de la Escuela Cuzqueña del s XVIII, y objetos de valor artístico.

El entorno de Purmamarca es bellísimo: El cerro de los siete colores y el río Purmamarca son los emblemas principales dentro de los atractivos naturales del lugar. La imponente belleza de los cerros "rojos" del Paseo de los Colorados es un recorrido obligado para todos. Se realiza en vehículo, o a pie. Se ingresa desde la entrada del pueblo, y son 4 km y para peatones, aunque también existen caminos secundarios y cortadas.

La Feria Artesanal funciona en forma permanente, ya que las actividades económicas del pueblo, principalmente son la confección y venta de artesanías, además de la pequeña hostelería y el alquiler de tours a las regiones cercanas, sobre todo a las Salinas Grandes y la Laguna de Guayatayoc, espejo de agua en plena puna donde pueden observase distintas especies de aves, entre ellas una especie endógena de flamencos rosados.

A poca distancia hacia Susques, también puede visitarse el Yacimiento Arqueológico de Huachichocana.

El culto a los muertos tiene una gran significancia entre los habitantes de los pueblos de la quebrada. Visitar el cementerio es un encuentro con el pasado y sensaciones encontradas en la originalidad de las construcciones en honor al difunto.

Cuando visiten Purmamarca, no se olviden de dos clásicos: Las tortillas a la parrilla rellenas de humita, y los variados postres regionales, incluídos, para mi sorpresa, alfajores rellenos de los mas variados dulces caseros.

Acompáñenme una vez mas a un maravilloso recorrido, desde el álbum que les comparto en esta oportunidad.


La próxima semana, nos metemos de lleno a recorrer La Quebrada de Humahuaca