jueves, 30 de agosto de 2012

¿Deberías poder vender música digital que compraste legalmente?


Normalmente cuando compras un bien físico como un automóvil, ropa o incluso componentes para tu computadora, tienes todo el derecho de vender ese artículo si ya no lo necesitas o quieres. Si las mismas leyes se aplican a trabajo creativo (y es así), ¿por qué no se pueden aplicar a contenido digital como música?
Esta pregunta es el centro de una demanda que Capitol Records presentó en contra de ReDigi, un servicio en línea que te permite vender música “usada” o “reciclar” canciones compradas en iTunes a una fracción del precio original. El servicio funciona en base a una primicia bastante simple, como el CTO Laryy Rudolph dice: Si lo compras y es tuyo. Deberías poder venderlo. Si lo robas, no deberías poder vender. Es muy simple.
Capitol Records, por su lado, ve a ReDigi como un almacén donde se infringe su propiedad intelectual. “Mientras ReDigi dice ser lo equivalente a una tienda de discos usados, esa analogía no se aplica ya que la tienda de discos usados no hace copias para llenar sus estantes.”
Naturalmente la RIAA esta de acuerdo con la disquera, y ha enviado una carta de desistimiento y cesamiento para ver si dejan de operar o cambian su modelo de negocios.
Es una situación complicada por donde lo veas ya que ambas partes tienen un argumento valido. La lógica y la ley dicen que deberías poder vender algo que has comprado legalmente pero al mismo tiempo el potencial para abusar el sistema es abrumador aunque ReDigi dice que tienen un exhaustivo proceso para verificar y evitar que se creen duplicados.
Se espera que el caso sea presentado ante un juez en octubre.
Fuente: http://www.techspot.com/espanol/noticias/49877-%bfDeberias-poder-vender-musica-digital-que-compraste-legalmente.html






Las lentes zoom sin zoom

Las lentes zoom son aquellas que tienen la capacidad de cambiar su longitud focal a traves del movimiento de sus componentes internos. Todos los novatos seguramente habrán tenido (o tienen) en su poder el clásico lente kit 18-55mm que casi siempre es el primer contacto con este tipo de lentes. El funcionamiento es extremadamente sencillo: para un lado son gran angulares, para el otro son teles.
Tri elmarLa mayor desventaja de estas lentes es justamente su mayor beneficio: el hecho de tener componentes móviles internos hace que sea complicada su construcción y por lo tanto su desempeño en muchas de sus versiones es mediocrecomparado con una lente de focal fija. Una lente que tiene solo una longitud fue construida para ese fin y por lo tanto todos sus componentes están optimizados para otorgar el mejor desempeño a esa misma cantidad de milímetros.
Las lentes zoom están optimizadas para todo el recorrido de longitud y por lo tanto tienen algunas falencias, en comparación con otras lentes. Ademas, necesitan más elementos internos y cuanto más cristal se interpone en el camino de la luz, menor es la calidad de la imagen resultante.
Existe una sola excepción a esta afirmación y sucede con las lentes de múltiples longitudes focales. Podrían calificar como lentes zoom, pero en realidad no ya que su funcionamiento es ligeramente distinto. En vez de abarcar un rango completo entre dos longitudes, tienen saltos entre cada una.
Las únicas dos lentes disponibles en el mercado común, que al menos este editor conozca, fueron fabricadas por Leica bajo el nombre de Tri-Elmar. Estas dos lentes tenían una longitud focal de 16-18-21mm y 28-35-50mm. Como su nombre lo indica, no se extendían entre los 16 y 50 milímetros, sino que poseían longitudes de 16, 18 y 21, sin pasos intermedios.
La ventaja sobre esta construcción es que se podría decir que son tres lentes primeen una, con toda la tecnología aplicada a cada longitud, en vez de una lente que varia sus componentes internos. Curiosamente, al ser desarrollado por Leica, el usuario no podía ver el efecto de la lente al cambiar su longitud, ya que estas cámaras utilizan un rangefinder. En su lugar, era necesario utilizar un adaptador.
Fuente: http://altfoto.com/2012/08/las-lentes-zoom-sin-zoom





Disney quiere hacer un remake de The Rocketeer

Un hombre vestido en colores rojo y dorado, que vuela con un jet-pack en su espalda y combate a los nazis. Suena como un cross-over entre Iron Man y Captain America, pero en realidad, es una descripción muy básica del siguiente proyecto de Disney: The Rocketeer. Los más veteranos recordarán que la casa de Mickey Mouse ya produjo una cinta basada en dicho personaje, en un lejano 1991. Bien, con el boom que han representado los filmes de superhéroes de Marvel, parece que Disney ya le halló gusto a la fórmula y este remake suena en los pasillos del estudio.

Para quienes no sepan (o no recuerden) quién es The Rocketeer, va una pequeña sinopsis. The Rocketeer es un personaje creado en 1982 por el ilustrador Dave Stevens. Sus aventuras, ambientadas entre las décadas de los 1930 y 1940- trataban sobre Cliff Secord, un piloto que descubre un jet-pach que le permite volar. El cómic es muy valorado por su estilo retro y su aire nostálgico, muy bien situado en las ciudades de Nueva York y Los Ángeles en esa época.
La historia llamó la atención de Disney, por lo que se realizó un filme homónimo en 1991, bajo la dirección de Joe Johnson. En la historia, desarrollada en 1938, Stevens se encuentra con el jet-pack, lo que llama la atención del FBI, el aviador Howard Hughes y -faltaba más- los nazis. La película contó con un desconocido Billy Campbell en el rol principal, acompañado por Jennifer Connelly y Timothy Dalton. El filme ha sido bien calificado por la crítica (6.3/10 en iMDB), pero tuvo una actuación pobre en taquilla: apenas recaudó 62 millones de dólares contra 42 millones invertidos.
El bajo margen de ganancias desalentó a Disney para hacer una secuela. Sin embargo, con el éxito reciente de sus franquicias de superhéroes, el ánimo parece ir hacia arriba (curiosamente, Joe Johnson fue elegido para dirigir Captain America: First Avenger). The Rockeeter tiene todos los ingredientes de un remake exitoso: ya ha pasado bastante tiempo para demarcarse de la original, tiene un protagonista atractivo, y los efectos especiales de hoy en día pueden venirle muy bien. Así mismo, las historias de superhéroes en otras épocas -como X-Men: First Class o la misma Captain America- han tenido una recepción aceptable. Yo era muy pequeño cuando vi la original, así que sí me emociona que mi generación (y las que vienen) vean nuevamente a The Rocketeer surcar por los cielos.
Fuente: http://alt1040.com/2012/08/disney-rocketeer




CloudVault: Subida instantánea de fotos a Google Drive


Los servicios que ofrece Google, suelen tener bastante renombre y reconocimiento por parte de la comunidad. Todos los usamos y la mayoría de nosotros estamos contentos con ellos. Pero, como en todo, existen algunos inconvenientes en zonas clave de las aplicaciones que pueden que, incluso al usuario más acérrimo, le hagan inclinar la balanza en favor de una aplicación de terceros. En este caso, podríamos dar un ejemplo que seguramente a más de uno le ha hecho pensar si usar dicha aplicación o no.
Google lanzó no hace mucho su servicio de almacenamiento en la nube. Todos lo conocemos como Google Drive, y aunque en la actualidad es un servicio bastante bueno, carece de una característica que sí tienen otros (Dropbox) y que puede ser muy importante para algunos usuarios: la subida instantánea de fotos. A pesar de que Google+ (en su aplicación oficial para Android) permite dicha función, ésta tiene unas limitaciones bastante notables. Para empezar, no es compatible con imágenes de gran tamaño (las fotos se comprimen en pre-carga). Además, no hay una manera sencilla de acceder a las fotos entre Google+/Google Drive y viceversa. Por lo tanto, desde Mountain View deberían darnos una solución a este problema.
En Google Play, y gracias a NekJo Media, tenemos la posibilidad de descargar una aplicación que nos dará la característica de la que Google Drive cojea. Ésta nos guardará todas las fotografías que vayamos tomando en una carpeta personalizada en nuestra cuenta de Google Drive. Todos los archivos se cargan en su tamaño y resolución originales. CloudVault (que así se llama la aplicación), también dispone de otras características la mar de atractivas que desgranaremos más adelante.
Además de servir como copia de seguridad para las fotografías que vayamos tomando, CloudVault nos permite hacer una copia de las fotos y vídeos presentes en la carpeta DCIM de la tarjeta SD de nuestro androide. Aparte de esta funcionalidad, también tenemos la posibilidad de restringir la carga a redes Wi-Fi (para no gastar nuestra tarifa de datos), así como seleccionar el tipo de archivos que queremos cargar (vídeos, fotos o ambos).

Siempre que tengamos la aplicación activada, tan pronto como saquemos una foto, grabemos un vídeo o copiemos un archivo a nuestra carpeta DCIM, la aplicación iniciará automáticamente la subida del archivo a Drive. Siempre y cuando no tengamos activada la opción de “sólo Wi-Fi”, en cuyo caso la subida comenzará cuando nos conectemosa dicha red.
CloudVault es una gran aplicación. Únicamente le encuentro una pega. Debería mostrar el nombre del archivo que está cargando. Por lo demás, es perfecta. Su interfaz Holo y sus opciones sencillas hacen que sea facilísima de usar. CloudVault requiere de Android 2.1 en adelante para funcionar correctamente y es totalmente gratuita.
En definitiva, si deseamos una subida instantánea de archivos a nuestro almacenamiento en Google Drive y a la espera de que la aplicación oficial nos brinde esta característica, esta aplicación es una alternativa perfecta que cubrirá totalmente esta necesidad.
Fuente: http://www.elandroidelibre.com/2012/08/cloudvault-subida-instantanea-de-fotos-a-google-drive.html








Ice Screen: una smart TV androide que podrás pasear por donde quieras

Ice Screen: una smart TV androide que podrs pasear por donde quieras
¿Qué ocurre cuando un gigante de las comunicaciones como el proveedor chino Tencent une fuerzas con un fabricante como TCL Multimedia(responsable, entre otras cosas, de la famosa tele de Ikea)? Pues ni más ni menos que un proyecto de Smart TV móvil con un jugoso chute de vitaminas. El equipo en cuestión ha sido denominado Ice Screen y entre sus principales bazas cuenta con un panel de 26 pulgadas con 1.366 x 768 píxeles de resolución, su propio navegador web y acceso a los servicios de la plataforma QQ, que además de mensajería instantánea ofrece vídeos, música y juegos.
Para enfrentarse a semejante explosión de cojntenidos, la unidad cuenta con un procesador Cortex A9 de doble núcleo a 1 GHz, gráficos Mali 400, 4 GB de RAM y, en caso de que nada te convenza, una ranura para tarjetas de memoria de hasta 32 GB. Entrando ya en el peliagudo terreno de las conexiones, nos encontramos con que viene surtido con un poco de todo, destacando un par de USBs y un HDMI, así como WiFi y una toma para auriculares. Por si esto fuera poco, el equipo puede colocarse tanto de manera vertical como en apaisado dependiendo de lo que vayas necesitando en cada momento y sí, en caso de que te dejes el mando a distancia en casa, acepta todo tipo de dispositivos androides (siempre y cuanto estos funcionen con la versión 2.2 o superior, claro).
Sobre sus perspectivas de futuro en occidente más vale que no preguntes a no ser que quieras llevarte un disgusto, pero si ya te has encaprichado perdidamente y no ves el momento de pasear por el mundo con tu televisión inteligente bajo el brazo siempre te queda la opción de viajar a su china natal para adquirirla por un precio de entre 250 euros y 315 dólares.
LEER MAS: http://es.engadget.com/2012/08/23/ice-screen-smart-tv-movil-android/